Querida Madre

Amada Esperanza, da la sensación de necesitar de otra vida completa para agradecer todo lo que me has dado en mi existencia. Eternas e infinitas gracias a ti y a Dios.

Estos días de vida solitaria son muy valiosos para mi, muy necesarios para seguir aprendiendo de mi mismo y de la realidad. Espero que para ti también sea totalmente provechosa la experiencia de visitar a Paola. Saquemosle todo el jugo a esto tan bonito que vivimos. Yo por ejemplo estoy aquí aprendiendo lecciones de cocina y mantenimiento de una casa, pero confieso que aún me queda grande sobre todo por mi mayor obstáculo, la pereza. Pero estoy procurando que no se me salga de las manos el orden de la casa aunque de verdad es complicado lidiar con el polvero y los lindos pelos. De todas formas me siento muy bien encontrándome a mi mismo en esta soledad que no se siente triste o angustiante, sino muy necesaria y sanadora.

Hay que verse a si mismo y reconocerse tanto los valores como los defectos de la misma forma como verse las dones y los obstáculos para evolucionar como ser humano. Haciendo un diagnóstico de lo que me pasa podría ponerlo en términos de haberme conformado a estar en constante adolescencia. No me enorgullece reconocerlo pero imagino que para ti también es difícil aceptarlo. Tú y yo gozamos y sufrimos de cómo se ha configurado nuestra vida presente, pero no deberíamos sentirnos culpables pero si ser responsables y procurar salir de la inercia actual. Aunque creo que las acciones de cambio deben venir más de mi parte.

Debo salir de tu nido. Puede uno creerse varias excusas para continuar aquí, cómo decir que es mi misión acompañarte y no dejarte sola o compararse con muchos contemporáneos míos que tampoco han podido ni querido salir de sus casas maternas y echarle la culpa a la economía o la falta de oportunidades en este país. Pero hay que ser sensatos y aceptar que es antinatural llegar a los treinta o cuarenta años y no haber salido del hotel mamá. Esa expresión es muy justa porque evoca rápidamente a una zona de confort muy dulce y cómoda, de la cual uno no quisiera salir jamás. Pero también uno le puede llamar zona de costumbre y seguir cuestionando esa aparente comodidad y darse cuenta que existen otros estados mejores que uno se merece como persona.

He estado meditando bastante sobre ¿cómo amarse mejor a si mismo?. Y parece que de esta pregunta clave se puede partir hacia la realización como ser humano pero además hacia amar mejor a los demás y ayudar a cambiar positivamente al mundo. Para amarse mejor hay que lograr un sutil equilibrio para tener una justa autoestima y sentirse realmente equivalente a las demás personas, no creerse ni más ni menos que nadie y aceptar la alegría y la fortuna de estar vivo y apreciar la vida ajena. Bella teoría, complicada la práctica, pero es un emocionante reto. Pienso que cuando uno logra amarse a si mismo con todo su ser, logra dar todo lo que uno vino a darle al mundo y cumplir las misiones que le dan sentido a la existencia. Y por supuesto esto también incluye darse todo lo que uno merece, ya no tanto con una actitud de petición continua sino de siembra de todo lo que se va a recibir.

Aparentemente cambiando de tema quiero empezar a contarte mejor cuales son mis vocaciones, metas y proyectos actuales, ya que con la excusa de conservar mi privacidad nunca te cuento en que ando y así parece que fuera un absoluto vago en la vida y así te queda difícil entender mis luchas.

Decidí estudiar cine más por intuición que por saber exactamente en que me estaba metiendo. Fui un niño en parte criado viendo mucha televisión y a pesar de la cantidad de imágenes que se recibe, con el tiempo uno llega a reconocer que existe un tipo de audiovisuales dirigidos a las profundidades del ser y hablan sobre los misterios la vida y la condición humana, trasmitiendo consciencia y verdades a través de la belleza. Ese tipo de "películas" y que ahora llamo "obras" son las que entiendo como cine y luego fui comprendiendo que es arte audiovisual. Entonces uno se vuelve cinéfilo al estar en continua búsqueda de obras que le hablen al alma y luego uno se vuelve cineasta al sentir por dentro la vocación de crear esas películas. Así fue que también gracias a ustedes, mis padres, llegué a la universidad a estudiar cine y televisión para muy rápidamente estrellarme con la realidad.

Mi idealismo con el cine fue puesto a prueba al darme cuenta que cada persona maneja un diferente concepto de él. Para algunos es simplemente un espectáculo para otros es una maquina de hacer dinero, para otros una forma de hacer propaganda y manipular mentes, para otros es farándula y uno se va dando cuenta que esas concepciones son más comunes de lo que uno cree y no sólo eran la visión de estudiantes, sino de profesores y profesionales del audiovisual (todo más complejo porque mi carrera era una mescolanza entre cine y televisión). Encontré pocos colegas y profesores que creían en lo sublime del cine y buscábamos nuevas dimensiones de nuestro arte y simultáneamente también creíamos en una responsabilidad social. En esos conflictivos años universitarios con estas convicciones llegue incluso a representar a los artistas en el consejo distrital de artes audiovisuales y también trabajé con El Espejo con quien compartía misiones. De esta forma poco a poco se fue alimentando un espíritu que luego se materializó en Cinelibertad con el que he querido trabajar por el cine y la sociedad. Y así logré graduarme ya con un fundación a cuestas y mucho trabajo por hacer.

Mis antenas creativas siempre están recibiendo señales de transformación y curiosidad por otros caminos audiovisuales. Cinelibertad nació precisamente de hacer las cosas diferente y sacar el cine a la calle. Además de ir en contra de un cine puramente comercial también he ido en contra de los formatos y muy a favor de encontrar nuevas formas de expresión y de lenguaje. Incluso le hice al mundo unas propuestas de amor por el cine que puedes leer o escuchar aquí. He estado atento a otros tipos de audiovisuales más interactivos y más cercanos a otras artes. También a pesar de estar alejado de la academia me he dedicado a la investigación hasta descubrir y experimentar lo que llamo cine realista en primera persona, y también desde hace harto tiempo estuve experimentando y reflexionando mucho sobre el cine multicanal. Te preguntarás donde están mis películas y te respondo que estoy embarazado de varias y que he hecho sobre todo experimentos, sin contar con mi opera prima llamada "Fin.", largometraje que presenté dos veces y destruí como parte de la obra proponiendo el concepto del cine efímero.

Kinola sigue en la línea de mis propuestas audiovisuales extrañas y luego me atreví a independizarme de Cinelibertad en un momento de crisis. Seguramente sabes que Kinola primero era una rockola para ver cine, pero he ido evolucionando las ideas y sigo trabajando en un modelo de negocios lo cual me ha servido para aprender sobre el mundo de los negocios, hasta haber cometido la locura y necedad de crear un microcinema pero todo con proyección hacia ser una gran empresa.
Cinelibertad continuó y hace unos pocos años decidimos crear un festival y apropiarnos de la bandera del cine experimental, que es una categoría muy amplia y compleja pero que es coherente con todo nuestro pensamiento, que ahora se complementa con los conceptos de cine expandido. De hecho estoy leyendo un libro de los años 70, llamado Cine Expandido, que parece escrito por mi en una vida pasada para el Óscar de hoy, que habla de una mística del arte audiovisual que se libera y nos libera gracias a la tecnología para al final lograr expandir nuestras consciencias.

Madre mía, se me alargó el resumen y se me escapan detalles como haber sido profesor, pero quería contarte todo esto para mostrarte cual ha sido mi camino y que he estado sembrando mucho y que pronto llegará mi cosecha. No te imaginas lo emotivo que fue para mi el descubrimiento de lo que llaman realidad virtual, es algo que hace tiempo se estaba gestando en mi y ahora se está materializando. Incluso ya estoy proponiendo una estética y una exploración del lenguaje a través de mi proyecto "Amateur" que será una serie de lo que llamo Realismo Virtual. Todo esto que te digo es para compartirte una alegría que produce seguir la vocación, es algo así como entender para que me envió Dios al mundo y saber que hay una coherencia en todo y que debo seguir trabajando duro porque esta es mi misión en la vida.

Y tú eres parte de todo esto. La estabilidad material que me has brindado que hace parte de la zona de confort (que no es del todo confortable) ha permitido todos mis procesos y descubrimientos. Pero más mérito tiene todo tu amor, comprensión y paciencia hacia mi. No imaginas cuantas veces me he sentido un Quijote luchando contra molinos y haciendo cosas absurdas, pero ahora no puedo detenerme por esos pensamientos. Hoy me encuentro en un momento decisivo, tengo que trabajar más duro por sacar adelante tantos sueños. Tengo la esperanza de que si sigo luchando todo lo que necesito se me va a ir dando: encontrar personas talentosas, lograr recursos técnicos y económicos y hasta incluso conseguir el nido que me merezco. 

Irme sanamente de tu casa es otra de mis metas a corto plazo. No puedo hacerlo ahora pero mientras tanto quiero aprovechar mucho mejor el tiempo contigo. Quiero ser mejor hijo, comunicarme mejor, ayudarte más con la casa, evitarte angustias, brindarte más alegrías... Incluso sueño con ayudarte a encontrar tus otras vocaciones, las cuales tienen que ir más allá de ser una excelente mamá, porque ya le entregaste al mundo dos hijos maravillosos, ¿cuáles serán tus otras misiones en la vida? ¿para qué más te trajo Dios al mundo? Tú sabes que tienes grandes dones y talentos que serían muy importante desarrollar y que te permitirán aprovechar tu tiempo y energía diaria. Ya no pensarlo como un trabajo sino como oficios placenteros para ti y útiles para los demás. 

Esperanza de mi corazón, existen muchas otras cosas que decirte y se me escapan ahora, pero no puedo dejar de pedirte perdón por todas las penas y angustias que te he provocado. Sé que lograremos amarnos mejor a nosotros mismos y así podremos amar mejor a nuestra familia, a nuestros semejantes, a la naturaleza y a Dios. 

Toda mi admiración y afecto por ti.

Óscar Pico

26dic2016